Yo, como algunos saben, vivo relativamente a las afueras de Madrid. Ayer fui para allá por la tarde y cada vez me encuentro más con una doble sensación.
En primer lugar la calma que me produce el lugar donde vivo hace que, a veces, necesite el bullicio de mi gran ciudad (si, la siento mía jeje)… su esencia cosmopolita, su Castellana, su Gran Vía, sus gentes…
Pero en segundo lugar llega el tremendo cansancio que me producen sus ruidos, sus sirenas, su contaminación, sus prisas…
Nunca llegaré al equilibrio entre el bullicio “bueno” y el “malo”. Pediría por unos minutos saborear la ciudad que me vió nacer. Parar todos sus ruidos y dejarla en silencio para disfrutarla mucho más… Poder admirar esa grandeza y andar por la Castellana con la misma tranquilidad que consigo en cualquier playa calma de la isla de Mallorca que tanto me gusta y tanto me relaja.
Pues en Madrid, la Gran Via a las 4 o 5 de la mañana da mucho mucho gusto.... Madrid es lo que tiene, que su bullicio y ruido, que muchas veces nos agobia, es como una droga sin la que no podemos vivir. Es lo que tiene. A mi me gusta mucho, lo disfruto una barbaridad, aunque hay días que la tranquilidad es algo que se necesita....
ResponderEliminarBueno, yo me voy ahora al centro a comprar.
Un besote cielo
Pasa como en Barcelona, bueno, quizás aquí no haya tanta prisa como en Madrid, yo estoy muy enamorado de mi ciudad, aunque evito todo lo que puedo el centro de la ciudad, demasiado bullicio, demasiada gente para mi.
ResponderEliminarBesazos!!
Mi ciudad, Vigo, no puede compararse en nada a Madrid, y aun así su bullicio me estresa... yo quiero mudarme al monte... jaja por cierto, vengo cotilleando desde el blog de thiago (por si te preguntas de donde he salido) un saludo!
ResponderEliminarAlex, a mi tb me gusta bastante más la Gran Vía a las 5 de la mañana que a las 5 de la tarde :P
ResponderEliminarDavichini... Bcn tiene mar y eso ya es una gran diferencia para perderse del ruido.
Sergio, gracias por "cotillear" y participar. Sin problemas! Yo vivo prácticamente en un monte y no se está mal jajaja.
Besos!